Que es la hernia discal
La hernia discal es una patología que discurre con dolor en diferentes niveles de la espalda dependiendo del origen de la misma. La hernia discal se produce al desplazarse parte del disco intervertebral hacia la raíz nerviosa ejerciendo presión sobre ella y originando sintomas como dolor, parestesias, hormigueos, etc, así como una importante limitación funcional.
El origen de esta dolencia suele estar relacionado con:
- Malas posturas.
- Levantar peso de forma inadecuada.
- Golpes y contusiones en la zona de la espalda.
Una hernia de disco al ejercer presión sobre los nervios los irrita y eso es lo que produce dolor, rigidez e incluso, puede provocar debilidad en los brazos y en las piernas, así como vértigos si se produce a nivel de la columna cervical. La mayoría de las personas que tiene una hernia de disco no necesita cirugía para corregir el problema y con sesiones prolongadas de magnetoterapia pueden aliviarse los síntomas y mejorar las limitaciones que se producen.
Síntomas de las hernias discales
La mayoría de las hernias discales se producen en la columna lumbar, aunque también pueden ocurrir en pocas ocasiones en la columna cervical. Los síntomas más frecuentes de las hernias discales son:
Dolor en las extremidades o en los brazos: Si la hernia discal está en la parte baja de la espalda (columna lumbar), se puede sentir dolor en glúteos, muslos y pantorrillas por la compresión del nervio ciático (la conocida “ciática”) Si la hernia discal se encuentra en el cuello (columna cervical), el dolor será en los hombros y brazos y se pueden producir vértigos y mareos.
Entumecimiento u hormigueo: Cuando las personas tienen una hernia discal sienten entumecimiento u hormigueo en la parte del cuerpo que está en conexión con los nervios afectados.
Debilidad: Todos los músculos conectados con los nervios afectados tienden a debilitarse lo cual ocasiona una importante limitación funcional y dificultad para realizar las actividades cotidianas.
Magnetoterapia y hernia discal
En la actualidad la magnetoterapia, terapia física basada en la aplicación de campos magnéticos, ha demostrado su eficacia. Los estudios realizados sobre este tratamiento concluyen que existe una relación directa entre la aplicación de la magnetoterapia y la reducción del dolor y la inflamación en pacientes con problemas a nivel musculo esquelético.
Efectos de la magnetoterapia
La magnetoterapia se inicia a nivel celular favoreciendo la actuación de la bomba de sodio potasio, por medio de la cual se mejora la despolarización y repolarización de la célula y con ello el aumento del nivel energético de la misma.
Tiene un claro efecto vasodilatador que aplicado sobre la circulación local provoca un potente efecto de relajante muscular y antiinflamatorio.
Además, también produce un potente efecto analgésico de larga duración y de regeneración paulatina de los tejidos. Este efecto mejora utilizando los equipos de magnetoterapia portátiles de manera continua durante un periodo de 3 horas diarias seguidas.
El aumento de sangre logrado gracias a su aplicación, genera un aporte de sustancias nutritivas que ayudan de forma activa a que los tejidos dañados vuelvan a su estado original.
Otras recomendaciones
Ejercicio físico: Fortalecer los músculos del tronco ayuda a estabilizar y sostener la columna vertebral, mejorando aún más los resultados del tratamiento de la magnetoterapia. En este sentido el Entrenamiento funcional tiene un papel importante.
Higiene postural: Mantener una buena postura reduce la presión sobre la columna vertebral. Mantén la espalda derecha, sobre todo cuando permanezcas sentado mucho tiempo. Cuando levantes objetos muy pesados, hazlo haciendo el esfuerzo con las piernas, y no con la espalda.
Un peso saludable te ayudara también a mejorar en todos los aspectos de tu salud.